Seguro que ya sabías que la capital andaluza es producto de una rica mezcla de culturas e historias, y si quieres pruebas de ello, tienes que ir a la Judería de Sevilla.
Son los barrios de Santa Cruz y San Bartolomé donde se situaba la mayor congregación de judíos.
Aunque su estancia en la ciudad duró «poco», nos dejaron desde historias hasta sinagogas que merecen ser conocidas y visitadas para hacer perdurar su memoria.
Y, ya puestos, ¡aprovechar para visitar los bellos lugares que habitaban dentro de la ciudad!
¡Acompáñanos a conocer la Judería de Sevilla, te sorprenderá todo lo que encontrarás en ella!
Cómo fue la historia de la Judería de Sevilla
Aunque vivieran una buena época en la urbe hispalense, las personas judías que vivían en Sevilla tuvieron que retirarse a otros lugares.
Pero vayamos al principio.
El antiguo barrio de la Judería de Sevilla empezó a acoger a sus habitantes en 1248, después de la conquista de Sevilla por parte del rey Fernando III.
Se tiene constancia de que existía la presencia de personas judías en la ciudad antes de esa fecha.
No obstante, fue a partir de entonces cuando su comunidad fue mucho más notoria.
Tanto que llegaron a ser 4 000 las personas que se instalaron allí hasta el año 1492.
El espacio que ocupaba este distrito judío se llegó a extender unas 16 hectáreas.
Esto la convirtió en la segunda judería más grande de España, después de la de Toledo.
Era un sitio próspero, en el que vivían médicos, científicos y banqueros.
Incluso el rey Alfonso X cedió cuatro mezquitas para que pudieran servir como sinagogas.
El final de la Judería de Sevilla y sus habitantes
Sin embargo, no todo era de color rosa en este idílico barrio de calles intrincadas y patios llenos de flor que podemos descubrir juntos en un tour.
En el año 1391 se asaltó por primera vez la Judería de Sevilla.
Fue entonces cuando algunos cargos de la iglesia empezaron a instigar a los sevillanos contra los habitantes del distrito.
El trágico final de este odio tuvo como resultado otra revuelta en la que fallecieron casi la totalidad de los pobladores del distrito.
Cerca de un siglo más tarde, en 1492, se decretó la expulsión de los judíos de España, o bien, su reconversión al cristianismo.
Cómo era la Judería de Sevilla: la huella que queda en la ciudad
El barrio judío estaba rodeado por una muralla que pretendía separar la parte cristiana de la ciudad.
Hoy en día, es un sitio que se puede visitar, donde viven vecinos orgullosos del lugar tan bello y que carga con tanta historia que los acoge.
Así que, si estás en la capital andaluza y te apetece pasar un buen rato entre calles estrechas y monumentos, no dudes en ir a ver los que te proponemos.
La iglesia de Santa María la Blanca
Un imperdible de este encantador barrio de Sevilla, fue uno de los templos que el rey Alfonso X cedió para que fuese usado a modo de sinagoga.
Con la partida de los judíos de la Península, el sitio volvió a ser una iglesia.
Esta iglesia barroca con fachada mudéjar, testigo ineludible del paso de las varias culturas que habitaron la ciudad, guardaba en su interior reliquias.
El pintor sevillano Bartolomé Esteban Murillo decoró sus paredes con algunas piezas de su obra.
Sin embargo, más adelante, estas fueron expoliadas.
El hotel Las casas de la Judería
Más que un hotel, Las casas de la Judería, es una «ciudad secreta».
En sus 134 habitaciones, más de 40 patios, con jardines, túneles y calles que parecieran sacadas de un laberinto, puedes volver casi a la época judía.
Lo especial de este alojamiento es que ocupa 27 casas, guardando su estilo tradicional, pero con una decoración única.
Es un buen sitio donde alojarse en Sevilla, pues, además de guardar esa esencia tan increíble, está muy bien situado.
¡Tanto que se encuentra casi al lado de la iglesia de Santa María la Blanca!
La plaza de Santa Cruz
Hablando del barrio de la Judería de Sevilla, que porta también el nombre de Santa Cruz, mencionar esta plaza es casi obligatorio.
En el centro de este espacio está la Cruz de las Sierpes, una obra de forja del siglo XVII.
En ella convergen calles importantes de la Judería donde sumergirte en leyendas interesantes.
En la plaza se encontraba la antigua iglesia de Santa Cruz.
En 1391, con las revueltas cristianas, se derribó la sinagoga anterior y se edificó la iglesia.
Sin embargo, en 1814 terminó demoliéndose también la última.
Hoy en día, la iglesia de Santa Cruz existe en otro emplazamiento.
Patio de banderas
Dicen que desde el Patio de banderas hay una de las fotos más bonitas de Sevilla, y es que, si encuentras el ángulo correcto, puedes fotografiar una escena magnífica.
¡La Giralda y la Catedral serán tu fondo!
El lugar es una plaza pública y arbolada que antaño fue parte del Real Alcázar.
Cuenta una leyenda que, cuando un rey o personaje de la corte, bien distinguido, llegaba a la urbe, se colgaban banderas para señalar su estancia en la ciudad.
De la historia de la Judería de Sevilla hasta nuestros tiempos
El distrito de Santa Cruz alberga leyendas y monumentos que recuerdan otras épocas.
Aunque el periodo que pasaron los judíos en la ciudad no fue tan extenso como el de otras culturas, dejaron un buen legado que hoy podemos disfrutar.
En un tranquilo y agradable paseo puedes descubrir el balcón de Rosina, el palacio de Mañara, la calle Verde o la calle de la Pimienta.
No te olvides de contemplar los agradables jardines, con sus fuentes y flores que realzan el ambiente.
El barrio es increíble, y si quieres descubrir más de lo que esconde en tu viaje a la capital, te acompañaremos. ¡Exploraremos a fondo la antigua Judería de Sevilla!
Imágenes | Guías y Tours, W. Commons