¿Sabías que el río Guadalquivir es uno de los más importantes, no solo de Andalucía, sino también de España?
De hecho, no se puede separar la historia de la ciudad de Sevilla de la de este cuerpo de agua.
Sin embargo, el Guadalquivir no es solo un mero lecho fluvial que cruza la urbe.
A sus orillas se han desarrollado barrios pintorescos, monumentos increíbles y parques espléndidos.
También lo cruzan puentes icónicos que no pueden faltar en tu visita a la capital andaluza.
¿Quieres descubrir lo interesante que es el río Guadalquivir y lo que puedes hacer a su alrededor?
Empecemos con un poco de historia sobre el río Guadalquivir
Es probable que, si le preguntas a cualquier sevillano por su río, se sienta orgulloso de él.
¡Y con razón!
Luego, tal vez te explique la anécdota de la primera vuelta al mundo en barco.
Antes de que eso sucediera, hay más historia que también es digna de mencionar.
En la época tartésica y turdetana, desde el siglo IX a. C. hasta el III A. C., Sevilla era mar.
El Guadalquivir, que nace en la sierra de Cazorla, en Jaén, traía sedimentos.
Con el tiempo, se conformaría el territorio que hoy conocemos como Parque Nacional de Doñana.
Sin embargo, ¡el río había sido navegable hasta la ciudad de Córdoba!
Constituía una importante vía de comunicación y comercio en tiempos del Imperio romano, cuando Sevilla aún se denominaba Híspalis.
Esto ha seguido siendo así durante siglos.
La primera circunnavegación de la Tierra partió desde el río Guadalquivir a su paso por Sevilla
¿Te suenan los nombres de Magallanes y Elcano?
Fueron quienes comandaron la expedición que dio la primera vuelta al mundo en barco.
Sus buques zarparon desde Sevilla, Guadalquivir abajo, el 10 de agosto de 1519, rumbo a las islas Molucas.
El objetivo era abrir una nueva ruta comercial con este territorio indonesio para la exportación de especies.
Después de atravesar el Atlántico y el Pacífico, desembarcaron en la actual Filipinas, donde en una batalla murió Fernando de Magallanes.
Juan Sebastián Elcano sería quien guiaría a la expedición de vuelta a casa, después de llegar a las islas que configuraban su destino.
No deshicieron el viaje, sino que continuaron navegando en dirección oeste.
Cruzaron el Índico y bordearon África hasta llegar a la capital andaluza el 8 de septiembre de 1522.
Esta, la de la primera circunnavegación de la Tierra, es una hazaña que se quedaría grabada en la historia de Sevilla, así como las actuaciones más modernas.
Fue sobre todo a partir del siglo XX cuando se empezaron a crear las llamadas «cortas», canales artificiales.
Estos permitieron mitigar las inundaciones que las crecidas de agua provocaban, así como mejorar la navegación a través del río Guadalquivir.
Cosas que puedes ver y hacer con el río Guadalquivir de fondo
En la actualidad, el famoso cauce divide la ciudad en dos, siendo protagonista de un montón de atardeceres de foto.
Contemplar el barrio de Triana desde su puente es una parada obligatoria para cualquiera.
¿Te contamos un secreto?
Es precioso si lo recorres en bicicleta y acompañado.
El río Guadalquivir sigue siendo tan importante hoy en día para la ciudad que un buen puñado de actividades se desarrollan a su alrededor.
¿Quieres saber cómo enamorarte de este río y de los paisajes que ofrece?
Visita el barrio de Triana
Quizá por haber quedado separado del centro de la ciudad, el barrio de Triana tiene un carácter, un encanto tan singular.
Desde el muelle de la Sal se puede ver la típica postal que seguro que reconocerás, la del puente de Triana con el reflejo de las coloridas casas del barrio en el cauce del río.
Vale la pena cruzarlo y pasear por la agradable zona, pintoresca por sus mercados, corrales de vecinos y establecimientos en los que el flamenco lo es todo.
Si te apetece ver el paisaje a la inversa, desde Triana hacia el centro de la urbe, puedes pasear por la calle Betis.
Discurre desde el puente de Isabel II (que también se apoda «de Triana») hasta el puente de San Telmo.
Se llama «Betis» por el río Guadalquivir, pues así lo nombraban los romanos.
Sin embargo, nos hemos quedado con el nombre, adaptado fonéticamente al español, que le dieron los árabes.
Admira la Torre del Oro
Monumento de indiscutible belleza, la Torre del Oro es la guardiana almohade del Guadalquivir.
También constituye uno de los puntos de interés más conocidos de Sevilla, junto a la Catedral, la Giralda o el Archivo de Indias.
Si das un tranquilo paseo por las riberas del río, podrás admirar la belleza que en ella reside.
Fue parte de una muralla defensiva, en sus momentos de esplendor protegía a los ciudadanos de los contrarios cristianos.
Desde ella se podían divisar a las naves enemigas que se acercaban.
Hoy, ya no se emplea para tales hazañas defensivas.
Pero, no obstante, ha quedado como un espectacular monumento que añade un distintivo especial a los recuerdos de quienes la fotografían.
Disfruta del parque de María Luisa y la plaza de España
Si el tiempo de tu agenda te lo permite y te ves con energía suficiente, puedes visitar el parque de María Luisa y la plaza de España.
Ambos espacios se encuentran a unos 20 minutos caminando del centro de la ciudad.
Pero, oye, así puedes aprovechar para pasear con el río Guadalquivir de fondo, admirando el puente de Triana, el de San Telmo y la Torre del Oro.
Cuando llegues al muelle de las Delicias, la terminal de cruceros de la urbe, podrás ver lo grandioso que es el parque de María Luisa.
Te encontrarás delante de 34 hectáreas de lo que inicialmente iban a ser los jardines del palacio de San Telmo.
Contemplarás lagos artificiales, puentes y estanques.
También hay puntos de interés como el museo de Artes y Costumbres Populares, o el museo Arqueológico.
Además, por supuesto, la famosísima plaza de España.
Así como el Atomium de Bruselas se construyó para la Exposición Internacional de la capital belga de 1958, la plaza de España se creó para la Exposición Iberoamericana de 1929.
Perderse en sus bellos rincones te resultará encantador.
Da un bonito paseo por sus riberas y muelles
Ya hemos dejado caer que los paisajes que el río Guadalquivir dibuja alrededor de su cauce son hermosos, mucha vida se congrega a sus orillas.
Los distintos muelles parecen tener caracteres diferentes.
Por ejemplo, el muelle de las Delicias recibe a los pasajeros de los cruceros, siendo una importante terminal del Puerto de Sevilla.
El muelle de la Sal, junto al paseo de Cristóbal Colón, es uno de los más bonitos de la ciudad.
Podrás ver la perspectiva del famoso puente de Triana y el barrio que le da nombre.
Además, algunos artistas callejeros, o simplemente grupos de amigos con instrumentos y muchas ganas de pasarlo bien, animan el ambiente.
También es un lugar en el que se celebran algunos eventos, como actividades de la Feria de Abril.
Y si tienes ganas de caminar, puedes recorrer los más de siete kilómetros que hay entre el Huevo de Colón y el Acuario de Sevilla, pasando por los muelles.
¡Te encantará el río Guadalquivir y sus increíbles paisajes!
Disfruta del río Guadalquivir, un imprescindible en la ciudad de Sevilla
Descubrir la magia que fluye en el río Guadalquivir es sumergirte en la esencia de Sevilla.
Este cuerpo de agua ha sido testigo de los siglos de historia en los que se ha desarrollado la urbe.
Te invita a descubrir sus orillas, explorar sus paisajes y conocer un poco más la ciudad (¡a eso podemos ayudarte!).
Disfruta de atardeceres mágicos desde el puente de Triana, agradables caminatas por el paseo de Cristóbal Colón con la Torre del Oro de fondo o los impresionantes jardines del parque de María Luisa. En tu visita a Sevilla, ¡admirar el río Guadalquivir es algo que no puede faltar!
Imágenes | Guías y Tours, W. Commons
